"Pero volvamos a los guiones.
La gran clave de este tema consiste en darme cuenta de que existen. Investigarlos y descubrirlos, analizarlos; encontrar qué actitudes de mi vida cotidiana no son realmente de mi elección, sino parte de un argumento que trato de cumplir.
Éste es el primer paso.
El segundo es romper con el guión, renunciar a él de cabo a rabo.
Y, después, si todavía quiero un argumento (llamémoslo proyecto), puedo escribir uno nuevo desde mi realidad, desde mis gustos y apetencias de aquí y ahora.
Y, si es posible, escribirlo con lápiz, para poder borrar lo que quiera cuando me dé la gana. [:)]
Y, sobre todo, un argumento que esté siempre dispuesto a ser destruido y remplazado por otro: uno nuevo más acorde con mi vida, con mi persona, con mi sentir de hoy."
Apenas estoy trabajando en el primer paso. Pero es el primer paso.
Gracias N. por ayudarme a iniciar este "darme cuenta".
