Hoy hice lo q hace tantísimo no me daba el tiempo de hacer: pasar una tarde con mi abuelo. Platicando sobre los últimos acontecimientos y trivialidades. Lo invité a dar un paseo por el jardín, algo que hace 20 años era cosa diaria se ha vuelto cada vez más esporádico ya que ni el suelo ni sus piernas son tan firmes como solían ser. Reviví tantas horas q pasaba cuando niña junto a él regando, plantando, trasplantando, podando. Tomados de la mano recorrimos lentamente el perímetro, yo siendo sus ojos, platicando y señalando las plantas nuevas y las de antaño. Él como siempre con sus tips y opiniones, que si esta planta se riega muy poco, que si esta otra no sirve y hay q podarla desde abajo.. El granado con su explosión frutal y el arbusto "nuevo" con flores bonitas. Él inició mi amor por el jardín, por las plantas, y sé q es algo q llevaré por siempre en mi..y me enorgullece decir q tengo un pulgar tan "verde" como el de él.
Sí, abuelo, yo te compraré esa bugambilia anaranjada q quieres... :)
